El amigo Pedrín, yo y mis hermanos Leonardo y Arturo / Circa 1965.
En mi primer post Testimonio de presencia mencionaba el casi imposible acceso al revelado e impresión de la común (hasta entonces) foto de ocasión.
En Cuba para mediado de los 60 el 'apagón del flash' iniciaría el camino de otros tan-familiares apagones del servicio eléctrico a pueblos y ciudades, en estos largos y oscuros años, hasta el mismísimo día de hoy. La foto que acompaña esta nota es una de las pocas que conservo de un escaso e hipotético grupo fotográfico (¿…?).
Ya nos queríamos parecer a Los Beatles porque habíamos visto fotos del 'diabólico grupo' en un insólito articulo de la revista Bohemia, en el cual los desacreditaban. Y oíamos una muy prohibida emisora de la radio norteamericana, la cual llamábamos “W”, con la que entonábamos canciones como...You're Gonna Lose That Girl, diciendo...Ni carne rusa-sa-sa.
Andándome de blog en blog la otra noche, visité uno de mis favoritos, La Alcancía del Artesano y me tropecé con un cuento de Samuel Feijóo titulado Torneo en Sabana Miguel. Bello cuento, no solo porque "hacía llorar a cualquiera que de veras fuera gente", de seguro; pero fue la geografía del lugar de la historia la que en mí despertó una memoria dormida. En la época de esta foto en cuestión, un grupo de amigos y mis dos hermanos nos íbamos de exploración en bicicleta a través de los otros caminos mucho menos transitados, que las dos salidas principales del pueblo de Palmira. Aventurándonos más allá del trapiche de Juan Palma descubrimos que se llegaba a La Sabana Miguel. Deslumbrante lugar especie de Paraíso de mar vegetal. En el cuento Feijóo no describe la imponente belleza del lugar…pero yo que últimamente estoy tan sentimental, casi lloro al recordar ese Paradiso Perduto.
Nota
Gracias Klaritza por tu comentario. En 1965, el maltrato a la isla era menor, de seguro. ¡Que lastima todo este horror!
Como en mi casa no tenían cámara fotográfica, lamentablemente tengo muy pocas, o casi ningúna foto del pasado, lo que lamento. Yo que soy un apasionado de los reportages fotográficos. Saludos.
ReplyDeleteLuis…generalmente en los (nacionalizados) centros fotográficos re-usaban tanto los líquidos, que las fotos terminaban más blancuzas que “La blanca palidez” de Cristina y sus Stop, muy en moda para entonces.
ReplyDelete¡Gracias!
Yo recuerdo mucho Sabana Miguel, soy cienfueguera y estuve becada (internada o "presa") en un IPUEC que había por allí llamado Dimas Martínez Padilla, se accedía en esa época más facilmente desde Caonao y te juro que ya de bello le quedaba poco y mis recuerdos de esa escuela tampoco cooperan para buscarle alguna belleza, los tiempos conspiran con la memoria y hasta los olores pueden cambiarnos la percepción de las cosas. Muy bueno tu blog, me encanta!!!, ah y un orgullo que seas cienfueguero!!! Saludos desde Buenos Aires.
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